¿Qué impresora comprar? Cómo elegir impresora perfecta y no equivocarte.
Es algo habitual necesitar una impresora y no saber qué impresora comprar. En nuestros años de experiencia en este mundo observamos con mucha frecuencia casos de consumidores que se arrepienten de haber comprado una determinada impresora. Lo más habitual es que no cumpla con nuestras expectativas, necesidades, pero sobretodo, que el coste por copia se eleve a precios carísimos.
Nuestra máxima siempre es intentar asesorar a quienes nos preguntan previamente por ello. Pero pocas veces el consumidor busca asesoría más allá de lo que un comercial determinado quiera o necesite vender en ese momento, o leer reseñas acerca del producto en distintos sitios webs de Internet. Para ayudar en todos estos casos en los que te plantees adquirir una impresora nueva os dejamos este post. Aquí encontrarás los puntos fundamentales en los que tienes que fijarte para saber qué impresora comprar y cómo elegir impresora según tus necesidades.
Si sigues estos pasos, dificilmente te equivocarás en la decisión. Y lo más importante y por lo que aquí estamos: conseguirás un gran ahorro económico en comparación con otras alternativas. Vamos a comprobar qué debes saber para no llevarte una decepción y saber qué impresora comprar.
Lo barato sale caro
Aunque suene a topicazo, quédate con esta frase porque en este tema es crucial: lo barato sale caro. A día de hoy, ¿te plantearías comprarte un coche sin ni siquiera informarte de cuál es su consumo y/o emisiones? Supongo que la respuesta será no, a no ser de que el aspecto económico no sea importante para ti y no te importe derrochar. El caso de qué impresora comprar es similar y escalable a la decisión de compra de un vehículo, en términos de eficiencia y ahorro.
El primer, y más importante punto a la hora de plantearte qué impresora comprar es buscar qué cartuchos de tinta o tóner utiliza. ¿Cuánto cuestan? ¿Hay opciones en cartuchos compatibles? ¿Qué rendimiento de páginas impresas tienen? Solo haciéndote estas preguntas podrás tener una mayor realidad acerca de lo barato o caro que te saldrá imprimir. Este es un punto en el que la mayoría de usuarios fallan.
Por norma, nos dejamos llevar por un precio atractivo o más bajo en la compra de la impresora. Lo que normalmente ocurre y no falla es la norma de: impresora barata, consumibles caros. Muchas de las impresoras de tinta para el hogar podemos encontrarlas por tan solo 50 o 60 euros. La decepción llega cuando comprar los cartuchos para la impresora en muchas ocasiones cuestan casi tanto como la impresora o incluso más.
En estos años hemos escuchado mucho la postura de algunos consumidores de que como sale más barato comprar una impresora nueva que cambiar los cartuchos, harían eso mismo, comprar una nueva. No debemos pasar por alto el impacto medioambiental y consumista de tomar este tipo de decisiones. Desechar maquinaria nueva, en perfecto estado, con el uso de plásticos, embalajes y materiales tecnológicos que conlleva la construcción de una impresora. Huelga decir que los cartuchos que vienen cuando compras una impresora, son cartuchos de cortesía o de baja capacidad que simplemente permiten poner en marcha la impresora por primera vez y ofrecen un rendimiento para pocas páginas comparados con los consumibles habituales. Por lo tanto, desaconsejamos totalmente este tipo de acciones.
Hablando de forma general, lo habitual es que las impresoras más económicas utilicen cartuchos con muy poco contenido de tinta. Aunque a priori puedan parecer más baratos que otros modelos de consumibles, el coste por impresión será mucho mayor. Nuestra recomendación al respecto es siempre intentar invertir un poco más en la compra de la impresora. Y de esta manera poder abrir el abanico a impresoras que utilicen cartuchos individuales, que tengan mayor capacidad, y que sean modelos que ya lleven un tiempo vendiéndose en el mercado.
Esto tiene una razón muy sencilla: cuando un modelo lleva tiempo comercializándose es probable que ya existan cartuchos compatibles que funcionen a la perfección, y que tengan una rotación de ventas notable en el mercado, hará que haya stock de continuo y unos precios mucho más baratos que sus respectivos originales.
Por poner un ejemplo más práctico, resultará fácil encontrar una impresora de HP o Canon en configuración de cartucho negro + cartucho tricolor cuyo coste pueda rondar los 50 euros. Cuando se agoten los cartuchos, un nuevo juego de consumibles puede costar otros 40 o 50 euros en originales, y entre 30 o 40 en compatibles (si es que ya existe la alternativa de los compatibles en el mercado).
Por otro lado, nuestra recomendación sería invertir un poco más en la compra de una impresora Brother o Epson en configuración de cartucho negro + cartucho cyan + cartucho magenta + cartucho amarillo. (Realmente lo menos importante es la marca de la impresora, ya que HP y Canon también disponen de impresoras de este tipo de 4 cartuchos). El precio de adquirir una impresora de este tipo puede partir de los 90 euros aproximadamente. Cuando se agoten los cartuchos, además de que podremos sustituirlos individualmente, tendran un coste de unos 40 o 50 euros en originales, y entre 8 y 25 euros en compatibles, eso sí, con un contenido de tinta muchísimo mayor que las impresoras del anterior ejemplo.
Por lo tanto, y en resumen, la inversión mayor en una impresora que ofrezca un consumo de consumibles mucho menor, y con mayor rendimiento, es fácilmente amortizable a partir del segundo cambio de cartuchos de la máquina. Y a partir de este cambio en adelante, el ahorrar imprimiendo será exponencial comparado con las demás alternativas.
Todo lo mencionando hasta aquí, es exactamente igual en el caso de las impresoras láser que utilizan el tóner como consumible. Es fundamental analizar previamente el tóner que utiliza, su precio y rendimiento. Además, es necesario conocer si también necesitan sustituir el tambor, ya que en ciertas impresoras es necesario sustituir el tambor cada cierto número de cambios realizados de tóner.
¿Qué tipo de cartuchos utiliza? Fíjate bien
La configuración más habitual en las impresoras más económicas es la de utilizar un cartucho negro + un cartucho tricolor (este subdividido internamente en tres compartimentos para los colores cyan, magenta y amarillo). Esta configuración tiene como principal inconveniente un mal aprovechamiento de la tinta de color.
Por ejemplo, imagina que imprimes a menudo documentos con un logotipo azul, esto hará que el color cyan se gaste de manera más rápida. Cuando el cartucho se agote, tendrás que reemplazarlo, aunque todavía quede tinta magenta y amarilla. Además, este tipo de cartuchos suele tener menores contenidos de tinta y un peor rendimiento que las impresoras de cartuchos individuales. En el caso de las impresoras de configuración de cartuchos independientes, podrás sustituir directamente el color agotado.
Hablemos de sus funciones
En cuanto a las funcionalidades que puedes encontrar en una impresora hay un espectro bastante amplio. Puede ser solo impresora, disponer de un escáner y realizar funciones de escaneado y fotocopiadora. Además puede contar con la función de Fax y pasar a ser un equipo multifunción. Otras funciones habituales pueden ser disponer de alimentador de documentos para el escáner, impresión a doble cara automática, disponer de distintas bandejas de papel o imprimir en tamaños más grandes como Din A3.
Como podrás imaginar, cuantas más funcionalidades incorpore la impresora más completa y también más cara será. En este sentido, recomendamos que estas funcionalidades se adecúen lo mejor posible a las necesidades de cada usuario.
Conectividad
Otro aspecto fundamental hoy en día en las impresoras es la conectividad. En la mayoría de las impresoras, las principales formas de conexión son: a través de USB, a través de cable Ethernet o de forma inalámbrica o WiFi. Las impresoras más económicas puede que dispongan sólo de conexión USB, y por tanto, solo funcionarán desde el ordenador al que estén conectados por USB.
Pese a esto, hoy en día es extraño encontrar impresoras que no incorporen la funcionalidad de conexión por WiFi. Aunque normalmente la conexión por cable es la que mejor y más rápido suele funcionar, y la conexión a través de Ethernet es una buena alternativa para impresoras que serán compartidas entre distintos equipos en una oficina, las impresoras con conexión WiFi resultan imprescindibles a día de hoy, especialmente en el hogar. Las impresoras WiFi nos permiten imprimir sin cables desde distintos dispositivos de sobremesa, ordenadores portátiles, tablets y hasta nuestros propios smartphones.
¿Impresora de Tinta o Impresora Láser?
Esta cuestión la abordaremos en profundidad en otro post, pero de manera resumida os explicamos las principales diferencias. Por lo general, las impresoras láser cuentan con bastante mayor rapidez de impresión. Cierto es que en los últimos años, las impresoras de tinta han recortado esta diferencia. Las láser cuentan con unos consumibles y una arquitectura preparada para realizar un mayor volumen de copias e impresiones.
Por lo tanto, para poder tener una buena rentabilidad con el sobrecoste que conlleva la compra de una impresora láser y sus consumibles, necesitarás tener un alto volumen de copias e impresiones. Si haces un uso intensivo de la impresora y/o necesitas una impresora con una gran velocidad de impresión, una impresora láser puede encajar en tus planes. Todo es cuestión de echar números y calcular el coste por copia.
Comprar impresoras de segundamano
En los últimos años estamos presenciando un auge de consumidores que han comprado su impresora en el mercado de segundamano. Ya sea en tiendas, o a través de las conocidas apps y portales de segundamano. A priori, puede parecer una excelente idea para comprar una impresora a un precio más económico. Pero no podemos pasar por alto la siguiente advertencia.
En la actualidad hay diversos fabricantes de impresoras que ofrecen descuentos en consumibles o ampliaciones de garantía a cambio de registrar la impresora en la página oficial y recibir actualizaciones del firmware de la impresora. Con esto lo que hacen es bloquear el uso de compatibles en la impresora y hacer que sólo pueda funcionar con cartuchos originales. Hay usuarios que ante esta problemática venden sus impresoras en el mercado de segundamano. Claro, con el desagradable resultado para el comprador de encontrarse con una impresora que solo podrá funcionar con cartuchos originales.
Por este mismo problema, nuestra recomendación es que si pretendes comprar una impresora de segundamano, te asegures de que no haya sido registrada o esté bloqueada para el uso de compatibles. También de la misma manera deberías comprobar el resto de puntos anteriormente citados de la misma manera que si fuera una impresora nueva: consumo, consumibles, funciones, conectividad…
Siguiendo estos consejos seguro que podrás elegir de manera más acertada qué impresora comprar y cómo elegir la impresora perfecta acorde a tus necesidades y presupuesto. Si necesitas que te asesoremos personalmente, o quieres conocer el mejor precio para los cartuchos de tinta y tóner de tu impresora, visita nuestra tienda.
Y por supuesto, si te ha resultado interesante este post, no te olvides compartirlo en tus redes o con cualquier amigo, familiar o conocido que esté buscando la impresora perfecta.

